“La paternidad no se celebra, se ejerce”: exhiben a deudores alimentarios en tendedero contra la violencia económica.

León, Gto.– Este domingo, mientras en muchos hogares se celebraba el Día del Padre, en la Plaza Principal del Centro Histórico de León se realizó una manifestación muy distinta.

Un grupo de mujeres organizadas en colectivas como Ley Sabina Guanajuato, Red Feminista León y la Red de Madres Feministas de León, colgaron hojas con nombres, historias y rostros de padres que han incumplido con su responsabilidad alimentaria, en lo que se ha denominado “El Tendedero de Deudores Alimentarios”.

La protesta, cargada de simbolismo, busca visibilizar la violencia económica que enfrentan miles de mujeres y menores de edad ante la omisión, indiferencia y abandono por parte de los padres de familia
No es casualidad que esta denuncia pública se realice precisamente en el Día del Padre. Para las organizadoras, es un recordatorio incómodo pero necesario: “ser padre no es una fecha, sino una responsabilidad”, señalaron durante la jornada.

La exigencia central del acto es clara: justicia alimentaria y compromiso real, tanto del Estado como de la sociedad, ante lo que consideran una deuda histórica con las infancias de México. Y es que los números son alarmantes: según lo expresado por las participantes, Guanajuato ocupa actualmente el primer lugar nacional en denuncias contra deudores alimentarios.

Una de las voces que rompió el silencio fue la de Vanessa Sevilla, madre de Sofía, una niña de nueve años con síndrome de Down. Su testimonio no sólo retrata una lucha legal constante, sino también el impacto emocional y físico que esta omisión paterna tiene sobre las infancias, particularmente aquellas con discapacidad.

“Yo tengo una niña con síndrome de Down de 9 años que su padre nunca ha querido conocer. Nunca ha dado pensión alimenticia”, relató. 

Comentó que la demanda inició en 2020 en Querétaro, donde madre e hija residen, mientras que el padre vive en León, Guanajuato. A pesar de haber ganado la sentencia en tercera instancia y de que se ha ordenado el descuento por nómina al centro de trabajo del deudor, la pensión no se ha hecho efectiva. 

Sigue el incumplimiento, a pesar de todo.Vanessa Sevilla

A pesar de contar con una sentencia firme, la justicia sigue sin llegar en forma de recursos para su hija, recursos que, como señaló, son especialmente necesarios durante los primeros años de vida de un niño con discapacidad. 

“Todo ese tiempo que te tardas en demandar, en tramitar, en esperar una sentencia, le perjudica directamente al niño. Y cuando logras la resolución, ya muchas necesidades pasaron sin ser cubiertas”, explicó.
Vanessa hizo un llamado a las autoridades a reformar las leyes y a considerar con urgencia las condiciones de las infancias con discapacidad. Pero también lanza un mensaje de aliento a otras mujeres que atraviesan una situación similar:

Que no se toquen el corazón al momento de demandar. Esto no se trata de venganza, se trata de justicia. Es un derecho de nuestros hijos.
“El abandono paternal también es violencia”

Alejandra Aguilera, integrante de la colectiva Ley Sabina Guanajuato, fue una de las mujeres que tomó el micrófono para denunciar públicamente una realidad que, aunque constante, sigue siendo invisibilizada: la violencia económica hacia niñas, niños y adolescentes, perpetuada tanto por padres ausentes como por las instituciones que deberían protegerles.

Hoy estamos aquí para recordar lo que por años ha sido invisibilizado. El abandono paternal también es violencia.Alejandra Aguilera

Explicó que la acción no tenía como motivación el rencor ni la revancha, sino la búsqueda de justicia. Un llamado a reconocer el daño profundo que el incumplimiento de las obligaciones alimentarias genera en el desarrollo emocional, físico y social de miles de infancias.

Con datos en mano, recordó que Guanajuato ocupa el primer lugar nacional en número de denuncias contra deudores alimentarios, con al menos ocho casos diarios ingresando a los juzgados desde el año pasado, según cifras de la propia fiscalía estatal. Este contexto, indicó, obliga a repensar la manera en que el Estado responde —o deja de responder— ante esta forma de violencia.

“De cada ocho denuncias, apenas cuatro alcanzan justicia, y solo después de largos procesos legales, que casi siempre benefician a quien puede pagar abogados privados. El sistema tiene una deuda histórica con nuestras infancias. Guanajuato no puede seguir siendo solapador de violentadores económicos ni invisibilizar el derecho superior de los menores”, denunció.

Durante su intervención, Aguilera subrayó que incluso cuando algunos padres cumplen con el pago parcial de la pensión, eso no los exime de su responsabilidad emocional ni del tiempo que han dejado de compartir con sus hijos e hijas. 

“El que paguen no significa que dejen de ser deudores”, afirmó. A esto sumó la necesidad de entender que la pensión alimenticia no se limita al dinero: debe garantizar el acceso a vivienda, educación, salud, alimento, vestimenta, atención emocional y espacios recreativos, elementos que rara vez son cubiertos en su totalidad.

La integrante de Ley Sabina Guanajuato no sólo señaló a los deudores, también responsabilizó a quienes, desde sus trincheras institucionales, fallan en la aplicación de justicia. Habló de jueces y juezas que archivan casos o escuchan sólo a los padres ausentes, de abogados de oficio que entorpecen los procesos y de defensas privadas inaccesibles para las madres autónomas. 

Criticó además a familiares paternos que encubren al deudor e incurren en fraude procesal, y señaló la ausencia de voluntad política por parte de legisladores y funcionarios, incluida la gobernadora Libia Denisse García Muñoz Ledo, quien —según dijo— no ha impulsado reformas de fondo.

También denunciamos a quienes deberían proteger a nuestras infancias y no lo hacen. Este sistema revictimiza a madres e hijos cada vez que se les exige recorrer un camino de obstáculos para conseguir lo que es un derecho.

Aguilera también abordó el rezago de Guanajuato en la actualización del Registro de Deudores Alimentarios, el cual apenas incluye a uno de cada diez hombres que incumplen con esta obligación legal. A diferencia de estados como Ciudad de México o Estado de México —donde el registro es manejado por el Registro Civil y está disponible al público—, en Guanajuato la gestión recae en el Registro Público de la Propiedad, lo que complica el acceso ciudadano.

“Una reforma reciente presentada por la diputada Sandy busca precisamente cambiar esto y permitir que el Registro Civil sea quien gestione esta información. Porque hoy, subir a un deudor al registro es casi imposible, prácticamente nadie lo logra”, denunció.

El tendedero, dijo, es una forma de justicia social frente a un sistema que no alcanza a sancionar.

Si la justicia no los alcanza, que al menos la vergüenza sí.

Además de visibilizar, estos tendederos también tienen un fin práctico: ayudan a madres que no saben dónde está el padre de sus hijos. 

“Muchas veces pasan personas que ven una foto y dicen: ‘Lo conozco, sé dónde trabaja’. Esa información es vital para las demandas”, explicó.

Desde Ley Sabina, Aguilera explicó que ofrecen asesoría legal gratuita, acompañamiento psicológico y contención colectiva. 

Contamos con listas de abogados que han dado resultados reales en procesos de Ley Sabina y pensiones… 

“Contamos con listas de abogados que han dado resultados reales en procesos de Ley Sabina y pensiones. Nos ayudamos entre nosotras con consejos sobre los procesos, el trato a nuestros hijos, cómo enfrentar las audiencias o cómo presentar pruebas”, relató.
Pero su llamado más fuerte fue a no desistir. A denunciar, incluso cuando la ley parezca estancada, porque el simple hecho de iniciar un proceso genera antecedentes legales que protegen a las infancias en el futuro. 

“Hay padres que después de abandonar, cuando envejecen, regresan a pedir pensión a sus hijos. Si no hay una denuncia de por medio, legalmente pueden exigirla. Por eso es vital dejar constancia. Y pues precisamente denunciando, ya con un antecedente, ellos pueden decir: No voy a darle este dinero porque en su momento él no me lo dio a mí, porque en su momento yo no recibí apoyo de esta persona”, manifestó.